martes, 7 de octubre de 2008

God bless America

El viaje

La primer escala en Miami tardó quince minutos, mientras los pasajeros se acomodaron y realizaban los check in de rigor antes de subir a la aeronave. Realicé mi segunda llamada programada para no dejar cabos sueltos.

- Hello? Can I speak with Mr. Gross ?
- Yes, One moment please. Who are you?
- Peter Brogs Meyer.
- ... Peter?
- Si, soy yo Alfred.
- Dónde mierda te metiste? Hace tres horas que mi secretaria trata de ubicarte y sólo consigue que tu contestador la atienda.
- Es que tuve algunos problemitas Al.
- Problemitas? Problemitas, hijo de una gran puta. Qué hiciste con los bonos que te dí para canjearlos?
- Justamente Al. Los bonos no estaban en su precio originario. Tuve que realizar un par de maniobras "financieras". Tu sabes: ingeniería financiera, Al.
- Qué diablos quieres decirme Pet? Dónde esta mi maldito dinero?
- Mira Alfred. Quería llamarte para que supieras que tu dinero está en buenas manos.
- Son of beatch. Your mother fucker.
- Alfred, no es vocabulario apropiado.
- Te voy a encontrar y me la vas a pagar Pet. Te lo juro.
- Ok. No me busques porque no voy a estar cerca. Justo ahora estoy volando hacia un nuevo destino.
- Hijo de puta. Lo vas a pagar.

Corte la comunicación y desconecté mi celular.
La azafata ofrecía una bebida. Quise un whisky. On the rocks.

El avión atravesaba el caribe. De un costado: Cuba, del otro, Jamaica.

Caracas se veía fabulosa desde el aire. El país de Chavez. Maldito militar que nos tiene agarrados de los huevos, el cabrón. Con los barriles de petroleo que nos vende, estamos financiando a un dictador que se está armando hasta los dientes.
Pero qué buen negocio nos estamos creando a futuro. Afganistan, Irak... tal vez Iran ó Venezuela. Quien sabe?
El futuro está en estas tierras, en el patio trasero de los Estados Unidos.
Hace décadas que lo estamos contemplando desde arriba. Sólo es cuestión de tiempo.
Dios bendiga a América.

No hay comentarios: